Hace tiempo que venimos escuchando sobre los despidos masivos de grandes corporaciones, con pretextos disfrazados de una crisis que está llegando pero con espíritu de inteligencia artificial, automatización de procesos y tecnología.
Las propias empresas tecnológicas que están creando soluciones, parece evidente que en un tiempo no necesitarán a dichos empleados, ya que habrán creado máquinas para sustituirse a ellos mismos y, lo mismo ocurre con los empleados que entrenan a los robots para hacer su trabajo (WTF????).
Parece que hay una tendencia pesimista que pone en tela de juego todo lo que la tecnología viene a traernos, pero a nosotros nos gusta ver el vaso medio lleno en lugar de medio vacío y creemos que hay otra versión de esta historia.
Esta revolución tecnológica huele mucho a la pasada revolución industrial que vivieron nuestros abuelos. Parece lógico que algunos sectores evolucionen o desparezcan en pos de otros nuevos que nos hagan la vida más fácil, y, si bien se crean productos como la aspiradora/fregona/mopa Roomba con intención de sustituir a la fregona y la escoba, existen diseñadores detrás que se encargan de crear estos nuevos productos. Bueno y que la fregona no va a desaparecer, porque la Roomba no está al alcance de todo el mundo. (¿Todavía?)
Entonces SÍ, desaparecen puestos de trabajo de gente que fabrica fregonas y SÍ, también se crean nuevos puestos con los diseñadores.
Desde este punto de vista, no parece tan temible dejarnos llevar un poco por todos los avances que la tecnología supone, pero desde luego es un tema que está en debate, porque aún está pasando. Y sospechamos que siempre habrá detractores y defensores a partes iguales.
Y tú, ¿de qué lado estás?