Tecnoestrés, ¿de qué estamos hablando?

Si algo ha cambiado nuestro día a día y la forma en la que interactuamos entre nosotros en los últimos tiempos, sobre todo entre las generaciones más jóvenes, es el uso de las redes sociales y las nuevas tecnologías. Este fenómeno no solo se ha forma parte activa en nuestra vida personal, sino que se ha convertido en muchos casos, en una herramienta más de trabajo,

Ahora estamos todo el día conectados, posiblemente causando más estrés del que ya teníamos.

Es un hecho que tenemos que aprender a adaptarnos a estas nuevas herramientas tecnológicas, de lo contrario, serás un inadaptado digital y te convertirás en alguien desconectado. ¿O no? Normalizar su uso en el día a día es una tarea pendiente, pero tiene otra vuelta y es, aprender a disociarnos de ellas, buscar momentos de ser solo humanos sin extensiones tecnológicas, solo estar.

El Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo define el tecnoestrés como “el estrés específico derivado de la introducción y uso de nuevas tecnologías en el trabajo, que conlleva efectos psicosociales negativos derivados del uso de las tecnologías de la información y comunicación (TIC)”.

¿Y fuera del ambiente laboral? Quítale a un adolescente el móvil y se volverá loco. Parece una frase hecha sacada de algún libro, pero lo triste es, que la realidad supera a la ficción.

Por eso, nuestra propuesta va simplemente hacia cuestionarnos el uso que hacemos de estas tecnologías que, si bien están para facilitarnos la vida, un abuso de las mismas puede llegar a distorsionar la realidad.