¿Eres feliz en tu trabajo?

A raíz de un artículo que leíamos esta semana sobre cómo ahora existe mercado en el que se paga por jugar a videojuegos, lanzamos una pregunta en LinkedIn: ¿Por qué te gustaría que te pagaran? Pusimos 4 respuestas muy básicas y esto fue lo que pasó:

• Dormir todo lo que quiera: 5%
• Comer rico todo el día: 10%
• Viajar por todo el mundo: 61%
• Comer y dormir mientras viajo: 24%

El 61% de las personas que respondieron preferiría que le pagaran por viajar y en un mundo de nómadas digitales nos preguntamos, ¿por qué no lo hacen?

Entendemos que nunca es tan simple como coger la maleta y largarse (o sí…) pero tenemos una realidad frente a nosotros que sí nos permite valorar este tipo de propuestas y sin embargo, todavía estamos un poco enganchados a este estilo de vida. Enganchados al tráfico por las mañanas, a no poder organizar tiempos en casa, a ir del trabajo a casa y vuelta a empezar tooodos los días, a pasarnos el fin de semana haciendo todo lo que no nos da tiempo a hacer… Enganchados al estrés.

Según en INSS (Instituto Nacional de la Seguridad Social) el estrés laboral, o estrés en el trabajo, es una de las principales consecuencias de la exposición a riesgos psicosociales. Hoy en día se trata como un problema colectivo y no individual que puede afectar a todos los trabajadores, de todas las categorías y profesiones. Además, el estrés laboral tiene efectos sobre la salud, tanto física como mental, pero también sobre cómo se realiza el trabajo y, por tanto, sobre absentismo, rendimiento y productividad.

(…) Según datos de Eurostat, el estrés es el segundo problema de salud más frecuente entre los trabajadores tras los trastornos musculoesqueléticos. Por ello también está aumentando la sensibilización, a nivel internacional, sobre la necesidad de actuar frente al estrés en el trabajo.

Sería muy idílico pensar que podemos viajar sin preocuparnos de nada, pero ¿estamos de acuerdo que hacerlo eligiendo el escenario, tus propios tiempos y amando lo que haces, sería infinitamente más productivo? ¿Menos estresante? ¿Más divertido?

¿Acaso no pasamos más de la mitad de nuestra vida trabajando? ¿No debería ser un escenario que saque todo nuestro potencial y creatividad y nos haga dar lo mejor de nosotros mismos?

¿No deberíamos amar nuestro trabajo y no querer desesperadamente que llegue el viernes?

Reflexionemos, ¿tu trabajo te hace feliz?.