Para hablar el idioma de dirección, necesitas algo más que intuición y buenas prácticas: necesitas datos relevantes.
Y no hablamos solo de contar altas y bajas o de llenar hojas de Excel con cursos realizados. Hablamos de métricas clave que te ayuden a justificar decisiones, detectar cuellos de botella y demostrar impacto real. Aquí van algunas que deberían estar sí o sí en tu próximo informe.
6 métricas imprescindibles
1. Tiempo medio de contratación
¿Qué es?
El tiempo que pasa desde que se publica una oferta hasta que la persona firma el contrato.
¿Por qué importa?
Porque cada día sin cubrir un puesto cuesta dinero. Pero también, porque cuanto más se alarga el proceso, más probable es que pierdas a los mejores candidatos por el camino.
Benchmark útil:
- En procesos estándar: 30 días.
- En perfiles tech o directivos: puede irse a 45-60 días (pero si vas más allá, algo está fallando).
En Talentoo, las empresas tardan solo 1-2 días en recibir los primeros CVs previamente entrevistados. Esto te permite acortar mucho el tiempo medio de contratación.
2. Calidad de la contratación
¿Qué es?
Una métrica más compleja pero muy reveladora: mide el rendimiento o adecuación de las personas contratadas en los primeros 3-6 meses.
¿Cómo se mide?
Puedes usar feedback del manager, evaluaciones del desempeño, adaptación cultural o incluso permanencia tras X meses. Lo importante es tener un criterio homogéneo.
¿Por qué importa?
Porque no sirve de nada contratar rápido si a los tres meses la persona se va, no encaja o no cumple objetivos.
En Talentoo, las empresas cuentan con 60 días de garantía. Y en caso de que el candidato incorporado no encaje, se reabre su proceso de selección sin coste alguno.
3. Coste por contratación
¿Qué es?
El coste total asociado a cubrir un puesto. Incluye anuncios, software, consultoras, tiempo del equipo, etc.
¿Por qué importa?
Porque te ayuda a justificar presupuestos y comparar canales. Si cada contratación te cuesta 4.000 €, pero externalizas con un fee cerrado de 2.500 €, ahí tienes argumento.
En Talentoo ese fee lo decides tú y, a diferencia de las grandes consultoras, hay toda una red de seleccionadores especializados trabajando en tus vacantes. No solo un consultor.
4. Tasa de rotación
¿Qué es?
El porcentaje de personas que abandonan la empresa en un periodo determinado.
¿Por qué importa?
Porque un exceso de rotación puede estar indicando problemas de clima, liderazgo, falta de desarrollo… o simplemente que estás contratando mal.
Benchmark
Una tasa de rotación anual superior al 20 % es preocupante (excepto en sectores como retail o atención al cliente, donde es estructural).
5. Tasa de conversión en los procesos de selección
¿Qué es?
La relación entre los candidatos que aplican, los que entrevistas y los que acabas contratando.
¿Por qué importa?
Porque te ayuda a saber si estás filtrando bien, si tu employer branding está atrayendo a las personas adecuadas y si tu proceso es eficaz.
Ejemplo realista:
De 100 solicitudes, entrevistas a 10, y contratas a 1 → tu tasa de conversión es del 1%.
Pero si necesitas 100 currículums para una sola contratación… algo no está alineado (tu oferta, tu proceso o tus canales). Mejor déjaselo a los profesionales de Talentoo, que te pasarán solo 6 o 7 CVs ya entrevistados y que encajan con el puesto.
6. Ratio de formación por empleado
¿Qué es?
El número de horas o acciones formativas realizadas por persona en un periodo.
¿Por qué importa?
Porque demuestra tu compromiso con el desarrollo interno y te permite cruzar datos con desempeño, clima laboral o retención.
En Talentoo Academy cuentas con formaciones a medida, bonificables por FUNDAE para hacer crecer tu equipo sin gastar nada.
Hora de profesionalizar tus informes
Incorporar estas métricas a tu informe no es solo para quedar bien en la presentación trimestral. Es para que RR. HH. deje de ser un área que “acompaña” y pase a ser un área clave en la toma de decisiones.
Además, no necesitas volverte loco con herramientas carísimas. Puedes empezar con lo que tienes: tu ATS, encuestas internas, herramientas de evaluación y, sí, hojas de cálculo (pero con cabeza).